jueves, 31 de marzo de 2011

Ensayo # 2

EL PROCESO DE SECULARIZACIÓN
Berger

La palabra Secularización proviene del latín “seculare”, que significa "siglo" pero también "mundo”. De ahí que secular se refiera a todo aquello que es mundano, por oposición a lo espiritual y divino. De “saeculum” también deriva la palabra “seglar”, con la que designamos a los miembros de la Iglesia que no son clérigos. Así pues, “secular” se opone a “religioso”, como “profano” se opone a “sagrado”.

También es el proceso que experimentan las sociedades a partir del momento en que la religión y sus instituciones pierden influencia sobre ellas. Con la secularización, lo sagrado cede el paso a lo profano y lo religioso se convierte en secular. Proceso por el cual la religión va perdiendo influencia en la sociedad, de modo que otras esferas del saber van ocupando su lugar. Un ejemplo claro de secularización es, en el caso del cristianismo, la Ilustración. La secularización implica una “mundanización” (excluyendo aquí el sentido peyorativo que pueda tener) de la religión y la sociedad, y sigue siendo también un tema de interés filosófico, sobre todo a la hora de plantear las relaciones que debe haber entre la religión, la política y la ética.

El término secularización ha pasado por varias aventuras en sus trescientos años de existencia. Fue originalmente empleado en el inicio de las guerras de religión para designar el hecho de que terrenos y propiedades eran sustraídos al control de las autoridades eclesiásticas. En el derecho canónico de la iglesia católica el vocablo ha acabado por designar el retorno al “mundo” de los individuos que habían recibido órdenes sagradas. Entendemos por secularización el progreso por el cual algunos sectores de la sociedad y de la cultura son sustraídos de la dominación de las instituciones y los símbolos religiosos. Está claro que la secularización se manifiesta por la evacuación por parte de las iglesias cristianas de áreas que previamente estuvieron bajo su control e influencia.

Igual que existe una secularización de la sociedad y de la cultura, existe también una secularización de las conciencias: miran al mundo y a sus propias vidas sin prevalecerse de las interpretaciones religiosas.

El impacto de la secularización tiende a ser más fuerte entre los hombres que entre las mujeres, entre las gentes de media edad y entre los habitantes de las ciudades. En aquellas partes del mundo occidental donde la industrialización ha adoptado formas de organización socialistas, la proximidad de procesos de producción industrial y los estilos de vida consiguientes que ello comporta a los hombres son los determinantes principales de la secularización.
No hay que suponer que el factor religioso opera de modo aislado de otros factores, sino más bien que mantiene una continua relación dialéctica con las infraestructuras prácticas de la vida social.

El católico vive en un mundo donde lo sagrado le llega mediatizado a través de distintos canales: los sacramentos, la intercesión de los santos, las repetidas manifestaciones de lo sobrenatural a través de milagros, etc.; el protestantismo trajo la abolición de muchas de estas mediaciones y sirvió de preludio históricamente decisivo a la secularización.

La secularización planteó una situación totalmente nueva al hombre moderno. Ha surgido un problema de significatividad, no sólo para instituciones como el estado, o la economía, sino incluso para las rutinas ordinarias se la vida cotidiana.



Comentario:

Es interesante, gracias a este texto, ver cómo la secularización de algún modo va ayudando al hombre a quitarse la idea falsa de un dios providencialista al cual lo llenamos de ideales y al que por tanto lo cargamos de nuestros problemas queriendo que él nos los resuelva. Esto hace que el hombre ponga los pies sobre la tierra y crea más en él mismo e incluso se valore más como persona, como individuo, que puede salir adelante con sus propias fuerzas. Claro, con esto no estoy diciendo que se desprenda de su relación con Dios, sino que se quite esa idea falsa de él como solucionador de los conflictos que el mismo hombre se genera

Por otra parte recordando temas anteriormente vistos, me doy cuenta de cómo la economía, en estos días, influye de alguna manera en el proceso de la secularización. La fuerza de la economía es la que hoy en día manda y modifica los modos de vivir de las personas.

sábado, 26 de marzo de 2011

El opio social. Karl Marx.

La religión, en su dimensión de iglesia, de institución ha sido, a lo largo de la historia uno de los entes más criticados, más acusados, si se puede mencionar esta imagen y esta vez, desde un punto de vista sociológico, en las palabras de este conocido autor que se distinguió por sus grandes aportaciones, tanto a la Filosofía como sus críticas a diversos temas que manejaba con libertad.
K. Marx aporta que la institución, (eclessiae),  tiene una dimensión, un status en la sociedad, y por lo tanto se va apropiándose varios elementos que pueden constituirla como una súper estructura. Esto lleva a cometer atropellos en los seguidores, atropellos de corte ético y moral, se consideraría que en ocasiones la religión y lo que dice ésta sólo es la verdad, esta verdad que viene del líder de la comunidad, institución, iglesia en la que se encuentra el individuo, -afirma Marx.-
El autor quiere poner en claro que la religión muchas veces es mera producción, una simple y llana teoría, que sus seguidores  y los jerarcas venden o comercializan la creencia a su conveniencia.
Afirma que la religión es un mecanismo social que legitima  el poder para la clase dominante y que compensa los sufrimientos de los no privilegiados.
Por otra parte me llama la atención la teoría de la religión como sistema de intercambio, esta  funciona en dos niveles: como sistema de transacciones entre hombres y dioses y entre dirigentes religiosos y sus seguidores. Estas teorías del control y del intercambio conciben a  la religión como muy unidad a la materialidad del mundo, (de aquí que tomen estos autores su idea).
Es difícil construir una teoría de la religión  ya que desde antiguo la religión está relacionada con la salud y la salvación, es decir de conceptos de bienestar físico, creo que se tiene que hacer una teoría dando respuesta a las necesidades del ser humano, laproducción reproducción eintercambio.

Lucien Goldman, “sociología del Dios desconocido”.

Lucien Goldman, “sociología del Dios desconocido”.

Para comenzar con este  comentario acerca de la  visión que tiene L. Goldman sobre esta duplicidad que existe entre religión y Dios, es necesario saber que hoy día existen muchas formas de ver a Dios, formas que dependen de la propia cosmovisión de cada individuo sobre la tierra. Es importante resaltar que el pueblo de hoy  “cree pero no cree”, o “soy católico, pero no practicante”, por señalar algunos ejemplos que se dan en la piedad popular. Se podría decir que este Dios escondido está en este estado porque el propio hombre lo ha “escondido” a su conveniencia.

Este fenómeno se puede dar a raíz de ver y de tratar de ver al mundo como algo conceptual, así como a todos los entes que se encuentran en este medio en el cual todos somos partícipes,  toda esta idea se trata de hacer al mundo más práctico, es decir que no nos quedemos solamente en la teoría sino tratar de llevarla a la praxis, tal y como diría  Karl Marx: “hasta ahora los filósofos se han preocupado por tratar de entender al mundo, lo que se trata es de transformarlo”. Sí, transformar las creencias, entenderlas y tener un aparato crítico de lo que se cree.
Se tienen que establecer las normas para tratar de llegar a comprender esta dualidad que existe entre fe y religión; fe que el individuo tiene, o que simplemente se cree que se tenga, porque creo, todos tenemos algo en que creer y en este caso la religión viene a complementar lo ya creído, pero siempre buscando coherencia entre las dos partes. Para así poder llamar a Dios, “el Dios no escondido”.

viernes, 25 de marzo de 2011

REFLEXIÓN DEL TEXTO DE Niklas Luhmann 2a parte

EL PROCESO DE DIFERENCIACIÓN DE LA RELIGIÓN
Siguiendo el tema referente a la emanación, ahora en este siguiente comentario quiero rescatar que en cierta manera a partir de una “unidad” supuestamente correcta surge la diferenciación o la oposición, la generación de la moral es un caso particular de la generación del orden como tal, aquí puedo decir que cabe la posibilidad, bajo este contexto de citar la frase un poco trillada que dice “ni tanto que queme al santo, ni poco que lo ilumine”, digo esto porque tanta unidad puede romper el soporte y a la larga puede traer serios conflictos, así como problemas de separación.
Vale decir dentro de este sencillo cometario que por su parte el dogma , visto desde mi punto de vista como algo que nos puede mantener atados a la creencia en un Dios o mejor dicho es visto como una herramienta que nos ayuda a librarnos de nuestras fallas o errores como “creyentes”, en este contexto nos podemos dar cuenta que el dogma permite disociar la religión doméstica, el culto a los antepasados y el culto a los muertos, sustituyéndose este último por una “oración de intercesión”, por los supuestos difuntos.
Añado a loa anterior que la fe toma nuevamente en la emanación, su papel de forma de norma, este su ves se nos presenta como algo que ha arraigado la conducta del hombre y ahora me doy cuneta que la fe hasta tiene un tinte psicológico, me atrevo a mencionar esto, puesto que psicológicamente podemos darnos cuenta que de la fe en la realidad de la trascendencia se pasa imperceptiblemente, siempre de nuevo, a la fe en la realidad de la fe.
Finalmente a mi cometario, solamente debo agregarle que existe una diferencia enorme entre el código y el programa que nos adentran en nuestra permanencia en la religión, por que ciertamente en el “código” encontramos la reflexión de la unidad que es Dios, mientras que el “programa” ésta es la revelación como tal.
Por otra parte en este análisis, debo rescatar que la estructura de las operaciones en el “código” consta de la inmanencia y la trascendencia, mientras que en el “programa”, esta estructura se basa en las reglas de comportamiento de las sagradas escrituras.
Y la pregunta para esta reflexión es: ¿el mito de la emanación te basta para cimentar tu fanatismo hacia la religión o te separa?

miércoles, 23 de marzo de 2011

Coloquio Internacional octubre de 2011

Coloquio Internacional
“Historia, Protestantismo e Identidad en el Continente Americano”

6, 7 y 8 de octubre 2011

Palacio de la Antigua Escuela de Medicina
Centro Histórico, Ciudad de México


El proyecto Disidencia y resistencia en el pluralismo cultural: Memoria y subjetividad en minorías sociales de la FES Iztacala de la UNAM, el proyecto Protestantismo, Geopolítica e Inquisición en la Hispanoamérica Colonial del Instituto de Investigaciones Históricas de la UMSNH, la Fraternidad Teológica Latinoamericana, y la Asociación Conference on Faith and History (organismo afiliado a la American Historical Association.

Invitan a investigadores, académicos e interesados en la historia del protestantismo en el Continente Americano a presentar propuestas de mesas temáticas o de ponencias individuales enmarcadas en alguno de los siguientes ejes:


  • Historia del protestantismo
  • Protestantismo e Inquisición en la América Colonial
  • Religión e identidad en América Latina
  • El protestantismo  y la enseñanza de la historia
  • Protestantismo y educación
  • Consideraciones metodológicas en el estudio del protestantismo
  • Catolicismo, protestantismo y cambio social
  • Protestantismo y cultura anglosajona
·        Cambios y procesos históricos del protestantismo en diferentes contextos americanos
  • Protestantismo, salud y sociedad
  • Imaginarios religiosos y vida cotidiana
·        Cuestiones críticas en la enseñanza de temas interamericanos


Se aceptarán propuestas de otros ejes temáticos relacionados con el tema central de la Conferencia.

Se deberán enviar las propuestas de ponencias y mesas temáticas a más tardar el 15 de abril al correo conferenciainternacional2011@yahoo.com.mx, incluyendo la siguiente información:


a)     Nombre del autor e institución de adscripción
b)     Correo electrónico
c)      Título de la ponencia
d)     Resumen de la ponencia (máximo una cuartilla)
e)     Mesa Temática donde sugiere sea considerada la participación.

Se recibirán propuestas y ponencias en español e inglés. Las propuestas serán revisadas por un Comité Académico de Selección que notificará a cada autor si fue o no aceptada. Las ponencias aceptadas deberán ser enviadas in extenso por correo electrónico a más tardar el 15 de agosto para ser incluidas en las memorias del evento que se entregarán en formato digital a cada participante.

No habrá límite en la extensión de las ponencias que se recibirán en formato digital, pero cada autor deberá tomar en cuenta que sólo dispondrá de 20 minutos para hacer su presentación en una mesa. Las ponencias deberán ser enviadas en letra Times New Roman de 12 puntos a doble espacio. Los participantes deberán avisar al comité organizador en caso de necesitar para su presentación un proyector digital.


Comité Organizador
Dra. Lourdes de Ita, Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo
Mtro. Carlos Mondragón, Universidad Nacional Autónoma de México
Mtro. Carlos Olivier,  Universidad Nacional Autónoma de México
Dr. Carlos Viesca Treviño,  Universidad Nacional Autónoma de México
Dr. Ronald Morgan,  Abilene Christian University (Sede Reino Unido)
Dr. Daniel Miller,  Calvin College (EEUU)


Comité Académico de Selección
Dra. Lourdes Jacobo Albarrán, Universidad Nacional Autónoma de México
Dr. Jaime Hernández, Universidad de Guadalajara
Dr. Felipe Vázquez, Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social
Mtro. Ariel Corpus,  Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social
Lic. Alejandra Ortiz,  Universidad Autónoma de Baja California


Contactos:
Mtro. Carlos Mondragón (FES Iztacala, UNAM) ftl_mexico@yahoo.com.mx
Dra. Lourdes de Ita  (IIH/UMSNH) loudeita@yahoo.com.mx
Dr. Daniel Miller (Calvin College) MILL@calvin.edu
Dr. Ron Morgan (Abilene Christian University) rxm03c@acu.edu

martes, 22 de marzo de 2011

Ensayo 1: El fenómeno religioso de San Juan de los Lagos desde la perspectiva de Max Weber.

Uno de los fenómenos religiosos más fuertes de nuestro país es el registrado en San Juan de los Lagos: números en crecida, fe popular desbordante… Sin embargo, sin tomar en cuenta los números y las demostraciones que como creyentes nos dejan con la boca abierta, es válido preguntarnos ¿cómo surgió? ¿cuáles son las características que presenta el culto en este santuario? ¿cuál es el objetivo o final, más allá de las manifestaciones de ferviente fe? Estas son algunas preguntas que, de una forma sencilla, pretendo responder durante el desarrollo de este trabajo.
La devoción popular a la Virgen de San Juan de los Lagos surge cuando, el grupo de cirqueros itinerantes a quienes se les había concedido la gracia de resucitar a su hija después de un grave accidente de acrobacias (por medio de la “virgencita Juanita”), divulgan el hecho de lugar en lugar. Todo ello sucedió a mediados del siglo XVII, y desde entonces, la devoción ha ido en crecida. Ello ha dado lugar a la formación de una ética económica muy particular del lugar, donde incluso las ofrendas (o limosnas) al ser recogidas en un lugar especial (y no durante las celebraciones), hace que los que aportan puedan llevar una especie de obsequio que les ayude a la práctica de su fe. Hay que decir que la ética económica del lugar la determina, además, el comercio ambulante de la zona, que hace mover el producto religioso y sus bienes de acuerdo a una visión de compra-venta secular.
Ello hace que las necesidades religiosas sean muy particulares, y que la moral que el pueblo sigue sea muy clara, ya que tienden a ser conservadores en las tradiciones, siempre buscando satisfacer a la “virgencita Juanita”, hasta en sus vestidos. Lo cual conduce a que la búsqueda de felicidad de los habitantes del pueblo gire en torno a la “virgencita”.
En San Juan de los Lagos, todos los obispos que han pasado no son nativos del lugar, lo cual hace que el profeta del pueblo no sea alguien del pueblo, y más bien, alguien impuesto por la Iglesia institucional. Que tanto esto ha afectado a la comunidad, no lo sé, pero no es un asunto que este trabajo pretenda develar. Sólo lo comento como una mera observación.
Por otro lado, es curioso que en la localidad se dé el proceso contrario de teodicea del sufrimiento, ya que, al menos dentro del santuario, todo lo que se le ofrece a la “virgencita Juanita” refiere a gracias concedidas o favores dados a personas concretas. Y aquí me voy a detener un poco, ya que es muy impactante el hecho de que, para recibir todo este tipo de ofrendas, el santuario haya dispuesto una escalinata donde la gente pueda colocarlos, existiendo en ella desde pequeñas cartas hasta vestidos de novia y bicicletas; lo que hace que, en su conjunto, sea muy fuerte ver y sentir la fe popular del pueblo plasmada en cosas sencillas, pero contundentes, que permiten palpar, al menos de una forma ligeramente racional, la relación que existe entre la gente y la “virgencita Juanita” (como le llaman).
Todo ello muestra un camino de salvación en el que, aparentemente, para la gente aparece primero la Virgen de San Juan y luego Jesucristo. Es como hacer quela religión se volviese matriarcal de nueva cuenta, sin observar los mitos fundantes impuestos después de la colonia, o simplemente, haciéndolos a un lado.
En ello, los funcionarios de la Iglesia institución juegan el papel de solamente la aplicación de los sacramentos (y administración de los recursos financieros de la diócesis), lo cual hace ver el abismo que existe entre el pueblo y el clero para unirse, ya que es común observar ritos mágicos (llámense así a hechos que no son aprobados por la iglesia jerárquica) dentro del templo para lograr algún tipo de milagro de la “virgencita Juanita”, como le llaman.
A pesar de que estas líneas parecerían ser una especie de análisis práctico de la situación, coloco la transposición de la comunidad con el texto de Weber debido a que la forma en que describe los hechos religiosos es una manera práctica de radiografiar aquellas partes que, para un observador cotidiano, no es capta de una manera clara, pero que al hacer resaltar algunas de las características claves que presentan aparentemente todos los hechos religiosos, es más fácil observar los detalles que existen en la religiosidad popular, y en la gente que hace de ella una fiesta viva. Pues aunque aparentemente no existe congruencia entre la iglesia institución con el pueblo que vive la religiosidad; es claro que la búsqueda por lo sagrado se da, y que cada parte aporta una riqueza inigualable a la forma de surcar el camino hacia la santidad.
Así, el servicio que cada parte aporta, diciéndolo un poco diferente de Weber, genera un carisma de la mística (tal vez no tan pura), que está al servicio de quien se atreva a observar, aunque en un primer momento, de aquellos que la viven. Lo cual hace que la vocación, como conducta de vida diaria, sea un servicio único que cada persona vive en la medida en que la religión aporta para él una forma de comunicación con el Absoluto, independientemente de lo racional que pueda ser, ya que el hombre, me parece, en su búsqueda por la racionalidad, ha tendido a perderla… aunque no por ello ha perdido su grandeza como hombre.

Bibliografía:
Weber, Max. Sociología de la Religión. Coyoacán. México, 1997.

lunes, 21 de marzo de 2011

Reporte de Lectura 4: Sociología de la Religión, de Max Weber.

I. Contribuciones de la Sociología de las Religiones Mundiales.
El análisis que hace Weber referente a las religiones mundiales, con cada uno de sus diferentes aportes, refleja de una forma muy nueva para mí la perspectiva que tiene la religión en el mundo. Y no por ello deja de ser fascinante, pues la manera en que la religión, con todos aquellos movimientos inherentes a ella, mueven al planeta, reflejan la forma en que los hombre, a su vez, nos movemos.
En ese sentido, el tener en cuenta la ética económica que se mueve dentro de la religión, en conjunto con la ética que conlleva, permite ver que las relaciones que se dan dentro de la religión son más diversas y dinámicas de lo esperado, debido a que, entonces, las necesidades religiosas cambian, así como la visión que se tiene de la moral; trayendo consigo que la necesidad de felicidad sea mediado y medida por un proceso de búsqueda de santidad que cambia dependiendo de los diferentes estratos sociales a los que se pertenezca, además de ser diferente dependiendo de la religión y estilo de creencia que se tenga. Por ello, la forma de comportarse cambia, originando múltiples maneras de alcanzar los valores requeridos para la salvación, aunque desde el punto de vista de Weber, siempre pragmático, que tiene en sí un sentido de gracia permanente. Todo ello, con ojos que permitan ver dentro de las luchas de poder que se dan al interior de toda religión como institución, en la que la coerción de sus miembros (aunque se ha tratado siempre de que sea racional) es clara y determinante en la forma en que se alcanzan los bienes de salvación para toda la comunidad. Por eso, el carisma es necesario discernirlo bien para comprender los motivos que se tienen antes de ingresar a la jerarquía eclesial, con objeto de evitar convertir a la religión en mera institución que no tenga los alcances necesarios en los bienes de salvación.
II. Protestantismo y Capitalismo.
Los casos que presenta el autor referentes a las sectas en Estados Unidos, con todos sus problemas, me parece que son una especie de imagen de lo que sucede cuando una religión pierde su foco en los bienes de salvación, debido a que parecería que lo importante para ellos implica cuánto tengo, y no cuánto creo. Cierto es que todo lo material que se logra por vía de la comunidad es muy bueno y loable para el desarrollo de la misma; sin embargo, el poner el ojo solamente en la prosperidad material, sin tomar en cuenta los motivos internos de la persona al decidir entrar voluntariamente a una secta, implica tomar el riesgo de falta de compromiso, fe, responsabilidad, por parte del candidato, ya que parecería que se juega con lo que el hombre sólo es administrador para beneficio meramente personal. Por otro lado, el hecho de que la gracia sea un don que se reconoce solamente como un ejercicio del exterior de la persona, por otros en concreto, sin tener en cuenta la conciencia del individuo (o fuero interno), indica lo pobre que puede ser conocida la persona, pues somos más que exterioridad como humanos. Sin embargo, es necesario resaltar la condición que tienen sus miembros para llevar al extremo sus prácticas de disciplina, con lo que se logra un compromiso (ya dentro de la comunidad) más fuerte del que se tenía fuera.

Las Institucionalización (esayo)

Uno de los terrenos poco inspeccionados es del fenómeno religioso, aspectos en el sociólogo se entremeterá en ello, en especifico como es el ámbito de la Iglesia católica.
El interés por la organización y la institucionalización de ciertas reglas o dogmas de eta Iglesia, es a lo que el sociólogo es atraído, su interés no es cuestionar, hacerlos válidos, pues para la ella ya lo son y no le importa si los estudiosos los acepten, no obstante a ellos le interesan el proceso de le aceptación de ciertas disciplinas. En un primero momento no encontramos que existen diversas representaciones de cuya función es muy importante, por una parte de legitimación en el dominio de las relaciones de producción o de la división del trabajo, es decir, el rol que tiene cada pastor en determinado lugar.
Las organizaciones dependen de diversos factores, unos están de acuerdo a la definición de los objetivos de las instituciones, estando entre ellas en ocasiones en desacuerdo que puede llegar a tener una tensión entre otros poderíos que han decidido imponerse dentro del marco social, no obstante la sociedad cuenta con muy buenos elementos, es decir con persona que se encuentra capacitada como para enfrentarse a los altos funcionarios de las instituciones religiosas, pues su preparación ya no les permite hacerse los sordos ante fenómenos que ocurren y gritan que ya no puede seguir siendo así.
Hay diferentes fenómenos que con el paso del tiempo, estos, se hacen legales, como lo son los ritos, en el transcurso de que va pasando el tiempo, éstos van adquiriendo poder dentro de los que lo practican y no quede de otra que ala institución de reconocerlos legalmente, por decirlo así, nos obstante aclaro de que en ocasiones no son tan reconocidos como para hacerlo legalmente o en términos religiosos, convertirlos en un dogma, pero esto a la sociedad-feligresía, no toma en cuenta, es decir, si algún rito no lo reconoces, no obstante ellos siguen realizándolo, y para ello me valgo de un ejemplo.
En su primera visita de Juan Pablo II a México, y después de que las cámaras escondían la imagen de el Papa, puesto que en todo la misa se la pasó durmiendo, al término de la celebración unas mujeres se acercaron para realizarle una limpia, chas personas provenían de la sierra Mazateca, de la prelatura de Huautla de Juárez, en este lugar las limpias, como así suelen llamarse, son muy comunes, al realizar esto con el Papa en instantes resalta las criticas, de que ¡el Papa fue limpiado de brujería!, las reacciones fueron, desde luego negativas,
Ante esto no hay ningún documento de la Iglesia que hable sobre esté tipo de rituales y que le sean permitidos, no obstante en dichos lugares se realizan dentro del templo y antes, durante y después de cada oración, esto además de que no este plasmad su legitimación en un documento, los mazatecos lo ha legalizado para ello y en ellos.
Ante este suceso puedo distinguir que en ocasiones los ritos van adquiriendo fuerza-poder, al grado que ya no es posible eliminarlos sean o no reconocidos por la institución tanto que ya es un momento indispensable del ritual, sin ello simple y sencillamente no sería celebración Eucarística
En ocasiones a la iglesia de le olvida que esta inserta dentro de la sociedad y por consiguiente hay una cultura de la cual se opta con el culto libre pero tampoco olvidemos que tanto la sociedad influye en múltiples cuestiones sobre la religión, así esta también sobre la religión.
La libertad de ejercer la fe, es la que s ele puede dar en la católica, entre comillas, ya que los jerarcas católicos piden por un lado la totalidad de libertad, pero por el otro niegan la libertad de expresión y de convicciones del resto de los ciudadanos, libertad para unos y mordaza para otro.

Y por ultimo resta comenta que la institucionalización de da así como en la iglesia como en otras organizaciones e incluso políticas, lo que se pide, como en el caso de la Iglesia, que se sean reconocido, legalmente por decirlo así, sus ritos porque el no ser reconocidos y llevarlos a la practica, ellos saben que lo que realizan no esta bien, por la Iglesia, y así les provoca un sentimiento de culpa, es decir están cometiendo pecado contra la santa Madre Iglesia, y el ser reconocidos ya no tiene este sentimiento y se mueven con mas libertad y confianza.


Bibliografía
MORÁN, Quiroz, Luis Rodolfo. Universidad de Guadalajara, en respuesta a las preguntas elaboradas por LC María Velázquez, El observador de la Actualidad, Querétaro, México.
Apuntes.

sábado, 19 de marzo de 2011

La religión, ¿producto social?

Con este trabajo se quiere mostrar cómo la idea de Weber, que en su discurso sociológico, hacer referencia a la interpretación, que desemboca en preguntarse por el sentido de los fenómenos religiosos, que es el área de estudio de la sociología de la religión. Es importante considerar  que el estudio de Max W. se orienta por definir en su estudio sociológico a la religión como un hecho social.

Este trabajo se contrastará con el pensamiento de Karl Marx, ya que este pensador resalta la idea de que la religión es un hecho social.
Weber, ablando de la ética económica, alude a la religión, tal expresión no es de teorías éticas firmes que surjan a partir de los tratados teológicos, ya que, tales tratados, en su importancia, no son más que instrumentos de conocimiento. Esta ética económica nos lleva a entenderla como las tendencias  prácticas, que se basan en un nivel, en cierto sentido psicológico de las religiones.[1]
Weber propone tres tendencias, que, de acuerdo a la religión pueden aparecer en el sistema religioso, teniendo como resultado una manera de actuar de los individuos en tal o cual religión. Estos tres ideales son: el actuar de acuerdo a  la tradición, actuar según el líder  y el actuar burocrático que tiene un tinte racional. De aquí se derivan las normas.

En éste punto surge el carácter sociológico de la religión, es decir, estos tres factores que he mencionado tienen un nivel de influencia fuerte en este factor social-religioso.
El líder tiene el “poder” de hacer y deshacer dentro del sistema religioso y de la institución, este papel se ve reflejado en el profeta y el sacerdote, que, en nuestro caso sería la imagen de Jesús y del sacerdote, (el cura), siendo que en un primer plano la imagen de Jesús representa un papel que sustenta una imagen legitimadora y el sacerdote quiere representar e interpretar y seguir las normas de lo burocrático. –Exclama Weber-

Siguiendo con esta idea, el profeta puede, también producir cambios en las  estructuras de la religión y se puede ver, hoy día, que la figura del sacerdote tiene la tarea de unirse a la tradición y a éste proceso de burocracia, lo cual lleva a un proceso de institucionalización de los actos religiosos, en otras palabras, la religión, según M. Weber, es un hecho social, en el que cada individuo interviene en éstos fenómenos religiosos, regidos por estas tres denominaciones que se han derivado.
Por otra parte, Karl Marx tiene una manera muy peculiar y revolucionadora de ver la realidad al igual que la Filosofía, -hasta ahora los filósofos se han pasado el tiempo en interpretar el mundo, de lo que se trata es de transformarlo. –(K.Marx.)
Marx deriva su pensamiento de la experiencia de ver los “estragos” que se estaban cometiendo con la sociedad, como es el caso de la religión, que, -exclama- que van ligados a intereses económicos. Por lo que propone cambiar  las circunstancias y las prácticas humanas, mediante la lucha de clases que propone.
Asimismo, se ve una similitud con  Weber al ver  a la religión como un producto social, donde hay relaciones sociales en las que se encuentran intereses de las clases de la burguesía, que en ocasiones pueden ser un tanto opresoras y explotadoras.
Se trata de dar una respuesta a la tesis de que Dios crea al ser humano, no el ser humano el que crea a Dios, aquí se ve clara la identificación de las clases, de sonde hay una alineación, esta alineación que ejerce la propiedad privada, dando píe al impedimento de crecer  a las clases de un estrato menor.[2]
Al contraponer estas dos dimensiones de la sociología de la religión me llega la idea de, que al igual que en la filosofía, hay autores que nos revelan su pensamiento, pero después llega otro y niega o reafirma lo que su antecesor había dicho, con esto dos autores podemos contemplar una visión extensa y racional de lo que se llama este “fenómeno religioso”, en un primer nivel referirnos a estas tres figuras emblemáticas de la que nos habla Weber, que, de alguna manera nos conecta con la visión de Marx, ya que desde esta perspectiva del capital, se nos va a explicar este concepto tan utilizado por “los siglos de los siglos”, que es la religión, pero al mismo tiempo creo que el mundo se mueve por y mediante el capital, incluyendo la religión, y pienso, qué es lo que se querrá que cambie la religión?, ¿Qué desaparezca? O simplemente que esté abiertamente enlazada con este sistema capitalista?
Desde estas dos perspectivas, pienso, se puede explicar mejor este fenómeno de la religión, ya que el hombre es religioso por naturaleza, y entiéndase por religioso, toda aquella forma de poner “fe” en algo, al creer en algo, desde lo más mínimo hasta lo más trascendental. 



[1]Cfr. WEBER, Max. Sociología de la religión. México, p. 5-8.

[2] Cfr. REALE, Giovanni;ANTISTERI, Dario, "Historia del pensamiento filosófico y científico" Tomo III Herder, Barcelona 1988

Programa detallado xiv rifrem[1]

Check out this SlideShare Presentation:

Pierre Bourdieu, explorador del campo religioso.

Este autor pretende responder algunas respuestas desde el pensamiento de Bourdieu, tales como: <<si se puede habalr de campo religion en sociedad, en las que las religiones- instituciones, existen en sociedad, tambien las que se han debilitado singularmente.
¿lo religioso se limita al campo religioso?
las respuestas parecen ser negativas. Se tiene que tratar al símbolo, ya que éste es un "producto" social, que va dentro de lo religioso; por símbolo se va a entender que es lo que forma al conjunto de la vida social.
Menciona que la sociedad religiosa debe ser considerada como una dimensión de las sociología del conocimiento, la religion es un isntrumento de comunicación y un instrumento de conocimiento, además de tomar de Weber que la sociogía religiosa es una dimensión de la sociedad del poder, hay monopolización  del poder religioso católico.
se busca legitimar las propiedades simbólicas y materiales que lo caracterizan en la estructura social. La posición de poder que ocupa una instancia religiosa en el campo depende del poder del grupo social.

viernes, 18 de marzo de 2011

COMETARIO DEL TEXTO DE Niklas Luhmann (1a PARTE)

EL PROCESO DE DIFERENCIACIÓN DE LA RELIGIÓN
En este punto hablar del proceso de diferenciación puede resultar un tanto complicado debido a que es un tema que se debe manejar rigurosamente, pero desde mi sencillo punto de vista considero que es importante que la religión comience a tomar su lugar y no inmiscuirse en una ensalada de posturas, ideas o prepotencias, digo esto, porque con este texto nos podemos dar cuenta que los problemas dentro de una sociedad deben de acoplarse al espacio que les compete.
Por lo dicho anteriormente, pienso que a la religión debe dársele lo que le corresponde, como decir al cesar lo que es del cesar, quiero decir que con la diferenciación, lo religioso no debe tomar partida en lo político y en la iglesia al mismo tiempo, porque considero que el que sirve a dos amos a la ves, corre el riesgo de quedar mal con uno. En este sentido la religión a su campo a lo suyo.
Me llama la atención, como la pauta que el autor nos da nos remonta a hacer conciencia de que lo político debe ser tratado por el estado, y me llama más la atención que el protestantismo si se enfoca a lo suyo, lo cual consiste en sostener y difundir su religión o ¿su secta?, en fin esto es algo que el religioso no puede hacer fácilmente, porque pienso que se nos da el complejo de ajonjolí de todos los moles.
Por otra parte es bueno que considere la teoría de la emanación, pues si dejara de lado esto parecería que no leímos a Luhmann, y bien creo que lo que debo rescatar de este punto es la concientización que debe surgir al darnos cuenta que la emanación, como el término se puede entender literalmente nos evoca un surgir, a un nacer, a un comenzar, etc. De todo esto puedo sostener con mi visto bueno, que la emanación surge de la uno, de aquí surge la dinámico, así como creo yo que también lo sagrado y lo profano.
Añado, además que a partir de la emanación surge la moral y esto me hace reflexionar sobre mi postura ética para poder o pretender acoplar el “evangelio” a mis necesidades e intereses y creo que es en este momento donde surgen fuertemente algunos sistemas de diferenciación.
Finalmente para cerrar mi cometario, resta mencionar que la fusión entre religión y moral es el resultado relativamente tardío de la evolución social, partiendo de esto para cerrar mi opinión, definitivamente, debo dejar en claro que la diferenciación no se ve, no se toca, no se huele, sino que se analiza, se entiende y se comprende, de lo contrario viviríamos como zombis dormidos en mundo del ni de aquí y ni de allá. La pregunta ¿conoces la diferenciación religión – estado?

jueves, 17 de marzo de 2011

Ensayo sobre Max Weber

Primer ensayo
MAX WEBER
“Religión como hecho social”

El propósito inicial del presente ensayo es sustentar la idea de que, en lo fundamental, la obra de Max Weber se orienta a definir las bases para la constitución del discurso sociológico, enfatizando el carácter religioso que nos compete. En segundo lugar, interesa mostrar cómo los enunciados que pertenecen a tal discurso tienen un carácter interpretativo, que nos lleve a preguntarnos por el sentido de los fenómenos religiosos de los cuales la sociología se hace cargo. Finalmente, se busca dar cuenta sobre cómo el discurso sociológico weberiano, tiene como referente a la religión que se postula como un hecho social.

Constitución del discurso sociológico
Los sociólogos de la religión han señalado, siguiendo a Weber, que no es problema de esta disciplina el resolver la pregunta de si en verdad puede haber una relación directa e individual o colectiva y mediada por las instituciones entre los hombres y lo divino.

“…el problema consiste en analizar las manifestaciones de la religión en al menos dos ámbitos: 1) de qué manera los hombres intentan la comunicación con lo divino e instituyen rituales y otras manifestaciones de sus devociones y 2) de qué manera las relaciones entre los hombres se ven influidas por sus concepciones religiosas.” [1]

En buena parte de esos análisis la sociología de la religión se ve en la necesidad de entender el comportamiento y las interpretaciones que los actores sociales hacen de su actuar
La lectura de Weber como iniciador de una tradición sociológica tiene que ver con el rechazo que se evidencia en su obra a asumir una única perspectiva analítica. Esto sitúa a Weber en contraposición, con dos de los pensadores sociológicos —Karl Marx y Emile Durkheim—, en quienes se cuestionaría la postulación de sistemas, en los cuales todo hecho social puede ser medible, y por lo tanto, insuficientes para agotar la realidad social.

Durkheim pretendió elaborar una teoría sociológica apelando a un método que por sus características y exigencias formales, desterrara los juicios de valor. Durkheim se basara en una ciencia de la sociedad capaz de medir y cuantificar, encontrando porcentajes y tendencias que lleven a generar reglas o leyes de carácter colectivo de la religión. Los hechos sociales en la religión se manifiestan por medio de las normas que esta contenga.

Marx, por su parte, basa su pensamiento en un materialismo histórico. En su propuesta hay un sustrato evolucionista, que se sustenta en una idea de la civilización como progreso, como sucesión de etapas; por otra parte, hay una toma explícita de posición en favor de un cierto tipo de desarrollo. La religión viene a ser una ideología que obstruye en el desarrollo del hombre. Recordando al frase de Marx refiriéndose a la religión como el opio del pueblo.

Ahora bien, sí la aplicación de un método particular no ocupa lugar central como garantía para alcanzar un conocimiento objetivo de los hechos sociales, como quería Durkheim, y si hay múltiples posibilidades de abordaje de esos hechos como el marxismo que para Weber no distinguía entre lo “estrictamente económico”, lo “económicamente determinado” y lo “económicamente relevante.

Siguiendo con el discurso, Weber se contrapondrá con estas posturas en sus modos de comprender a la religión como hecho social, diciéndonos que lo importantes es situarnos en el sentido de los fenómenos, haciendo un ejercicio interpretación. Consecuentemente, Weber llega a señalar que puede haber tantas ciencias como específicos puntos de vista existan en el examen de un problema, y que nada autoriza a creer que hemos agotado todos los enfoques posibles [2]

Sociología e interpretación

Si la sociología es un discurso, y si su objeto se construye por la vía de una selección que privilegia un punto de vista particular del investigador social, sus temas y sus elaboraciones no son otra cosa que la expresión de una mirada particular, de una perspectiva. La sociología es el estudio de las lógicas internas de la sociedad.
Las “lecturas” de la sociedad no proceden por vía de construcciones que la describen sino por atribución (derivada de un interés particular) de significaciones, esto es, por vía de interpretaciones sobre los fenómenos a través de los cuales se expresa la sociedad como tal.
La “exigencia interpretativa” de la sociología impone que se opere con categorías o construcciones conceptuales, de las que los “tipos ideales” son un modelo en la metodología de Weber. [3]

La interpretación es condición para la postulación de ciertos y determinados rasgos como característicos de hechos, dentro del dominio de las ciencias de la cultura y está, por tanto, al servicio de la formación de conceptos válidos en ellas. Desde este punto de vista, es también uno de los presupuestos de sus discursos.
En Weber se presenta el método fenomenológico en donde la unidad de análisis es el individuo como ser que le compete la interpretación de la religión. Weber tiene una postura abierta, no quiere como lo mencionamos antes, generar un conjunto de normas regidoras de la sociedad en el ámbito de la religión. Por eso, insiste en la necesidad de entender el papel de lo religioso en la historia de las diversas civilizaciones, en especial las clásicas, y emprende un amplio análisis de las manifestaciones y rituales y su relación con el ethos de los diversos pueblos. [4]

Religión como hecho social

Comenzaremos este tercer apartado hablando sobre la ética económica que resalta Weber para trasladarnos al sentido de las acciones religiosas.

“(…) Ética económica de una religión. Esta expresión no alude a las teorías éticas infalibles a partir de los tratados teológicos, ya que éstos, a pesar de su importancia en ciertas circunstancias, no pasan de ser meros instrumentos de conocimiento. La expresión "ética económica" alude a las tendencias prácticas a la acción que se basan en el nivel psicológico y pragmático de las religiones.” [5]

El propósito de Weber es mostrar el sentido de estas tendencias prácticas de las religiones, las cuales están regidas por tres tipos de ideales, desde los cuales se explica el modo de actuar de los individuos pertenecientes a una religión. Los tres ideales postulados para el actuar son: 1) actuar de acuerdo a la TRADICIÓN, 2) actuar según el LIDER, la razón se vincula al carisma y 3) el actuar BUROCRÁTICO RACIONAL, que son las normas racionales.


En tal postura de Weber, asumimos el carácter de la sociología de la religión, rescatamos el papel tan trascendente del modo de actuar del líder que provoca un movimiento al criticar las normas y tradiciones. Sin embargo, el líder se hace presente en la sociedad por medio de dos medios: el profeta y el sacerdote. El primero refiere directamente a la imagen de Jesús como principio legitimador, y al segundo, que es el sacerdote, en la cual su tarea es interpretar y seguir las normas de lo burocrático. El profeta, por tanto, es el encargado de producir este cambio en las estructuras de la religión.

Sin embargo, en la actualidad, el sacerdote es el encargado de seguir las tradiciones y unirse al proceso de la burocracia lo cual llevara a los fenómenos religiosos a un proceso de rutina que se convierta, después, en un proceso de institucionalización de los actos religiosos.

Concluimos que la religión es un hecho social, en el cual, por medio de la perspectiva de Weber cada individuo interviene en los fenómenos religiosos, regidos por las tres ideales de actuación que lo llevaran a construir una sociedad dependiente del actuar en la postura de Weber.

Bibliografía:

[1]MORÁN, Quiroz, Luis Rodolfo. Universidad de Guadalajara, en respuesta a las preguntas elaboradas por LC María Velázquez, El observador de la Actualidad, Querétaro, México
[2]Sociología de la religión, Max Weber, http://www.antroposmoderno.com (en línea)
[3]FREUND, Julien. Sociología de Max Weber, Ediciones 62, Barcelona, 1967, pág. 40.
[4]MORÁN, Quiroz, Luis Rodolfo. Universidad de Guadalajara, en respuesta a las preguntas
[5]WEBER, Max. Sociología de la religión. México,p.7

miércoles, 16 de marzo de 2011

Primer ensayo

Marx y su crítica a la religión.

En el presente ensayo quiero abordar la postura de Marx, respecto a la posición materialista de este autor alemán, teniendo su principal enfoque en la religión. Por lo mismo, quiero simplemente exponer el tema de cómo se fue dando dicho materialismo, para instalarlo en el seno de una crítica a la filosofía especulativa, “los filósofos no han hecho más que interpretar de diversos modos el mundo, pero de lo que se trata es de transformarlo”[1] que hasta nuestros días no puede pasar desapercibida. De este modo, la religión toma un papel preponderante, que brota al seno de dicha crítica, en ese afán de transformar la realidad, desde la reflexión de lo concreto.

Karl Marx hace un replanteamiento de la toma de conciencia, a fin de hacer una transformación del mundo, por lo que en una primera parte ataca la filosofía y aquellos pensamientos que tienen como fin meramente la contemplación, develando los caracteres ocultos que hay detrás de dichos estudios, principalmente en le rango socioeconómico.

Su concepción del mundo, lleva a concebirlo de manera maleable, en un constante devenir, que recae en una irreparable transformación de éste, por lo que sus principales instituciones sociales, quedan claramente desenmascaradas, puesto que quedan al descubierto sus intentos de estáticidad, que lleva a una fundamentación de su poder. Cabe recordar, que su filosofía se acienta al interior de una crítica rotunda al sistema hegeliano, que entre sus partes, da una preponderancia a la justificación de instituciones como el Estado o la Religión, desde una posición metafísica.

Marx, en consecuencia a las críticas antes expuestas por Ludwing Feurbach, en su famoso libro “la esencia del cristianismo”[2] , hace una ampliación llevando su pensamiento hasta sus máximas consecuencias, desde un pensamiento nuevo y original, que atrpopeya por completo las maneras de sustentar la vida social hasta antes de él.

Así primeramente, se instala en un pensamiento de lo concreto, inmanente, en contraposición de un pensamiento trascendente; por lo que hace severas críticas a las posiciones que intentan fundamentar sus sistemas económicos en la óptica de la trascendencia. De esta manera ataca de lleno la conciencia, tan exaltada en la modernidad, apelando al ser existente, ser en relación con su realidad para transformarla, perfilando su crítica a la religión primeramente, no es la conciencia la que determina la existencia; sino la existencia la que determina la conciencia.

Con esto, el concepto de praxis[3] adquirirá una relevancia radical en el pensamiento, y será el punto de partida para su crítica airada contra la religión. Ya que la realidad y el pensamiento que surja de ella, tendrá que dar cuenta de lo práctico antes que lo abstracto.

Es por esto, que toda la apología de la práctica que hace Marx, cobra relevancia al percatarse de las desatenciones sociales que existían en cuestiones de religión que van ligadas a otros intereses, principalmente económicos, por lo que advierte claramente, que esto debe de cambiar, por lo que es indispensable una modificación de las circunstancias, y de las prácticas humanas, mediante una práctica revolucionaria; es decir, con una lucha de clases, en las que se quede plasmado una praxis inmanentista, a una esperanza trascendente, “la base terrenal se separe de sí misma y se plasme en las nubes como reino independiente, sólo puede explicarse por el propio desgarramiento y la contradicción de esta base terrenal consigo mismo”[4].

Por lo mismo, ve que el sentimiento religiosos es un producto social, es un conjunto de relaciones sociales, en las que hay detrás intereses de las clases burguesas y opresoras, que en ven en una esperanza trascendente, la justificación perfecta para la explotación y el lucro de los bienes producidos. Así desde su materialismo práctico, ve una contemplación de la sociedad civil, desde sus individuos y relaciones.

De este modo, Marx ahonda en el problema que anteriormente Feurbach había propuesto anteriormente, en el sentido de que el hombre crea la religión, “El hombre creó a Dios a sus imagen y semejanza, y no al revés”[5], pero lleva hasta sus últimas consecuencias, esta parte, puesto que ve clara la alienación de parte de la sociedad de clases, que necesitan de dicho Dios, para poder prohibir la realización y el desarrollo de la sociedad, en un nivel parejo para todos.

Pero deja en claro, que no tiene como objetivo ridiculizar o desacreditar el fenómeno religioso, “para él la religión no es una invención de sacerdotes mentirosos, sino la obra de una humanidad sufriente y oprimida, obligada a buscar un consuelo en el universo imaginario de la fe”[6]. Por tanto, hay que transformar las situaciones, que obligan a las personas a basarse en una fe ciega, para que no tenga que depender de este fenómeno para encontrar un verdadero consuelo, es por esto que la praxis toma un relieve importante, de cara a las políticas injustas.

Es por esto, que la crítica de Marx, más que una crítica incruenta a la fe o al sistema religioso, hace una crítica al sistema injusto que el filosofo ve en su época, que mediante la fe se absolutiza y se justifica, con el fin de instalarse desde una clase burguesa, que no necesita el cambio y utiliza la imagen religiosa para dicho fin.

Concluyo así, que la imagen marxista, es una crítica que más que hacernos desgarrar las vestiduras y condenarla, nos debe de llevar a replantear la religión, desde sus principios verdaderamente evangélicos, que se inclinan a los más desprotegidos, pero no a modo de alienación, sino en una verdadera transformación que lleva a superarse así mismo, y a mejorar las condiciones de vida; por lo que no me parece nada raro que la teología de la liberación, tenga como base un pensamiento de corte marxista, ya que es un camino de dignidad y humanidad, en el sentido de la continúa búsqueda de igualdad y no conformarnos con lo establecido, que lleve a deshumanizar. No se trata de hacer guerrillas e ir contra el sistema sin más nomás, sino de asumir una postura en la que verdaderamente se promuevan todas las clases, con el establecimiento de parámetros para fomentar la dignidad, y de este modo estar atentos a no enajenar a las personas, o ser instrumentos de clases opresoras.

[1]MARX, Kart; Tesis sobre Feurbach, http://www.marxists.org/espanol/m-e/1840s/45-feuer.htm; [en línea] , [15 /03/11].

[2]FEUERBACH, Ludwing, “La esencia del cristianismo” Ed. Trotta Madrid 2009 pp. 400. Donde expone un abierto sensualismo y un humanismo ateo, haciendo fuertes críticas a la religión cristiana, haciendo alarde de que el ser humano se prefigura desde la esencia de lo que es o lo que debería ser, y se las atribuye a un “Dios” impersonal.

[3]Dicho concepto, posteriormente será utilizado, para hacer una reformulación de la religión y el cristianismo en América Latina, con la llamada Filosofía y Teología de la liberación.

[4]MARX, Kart; Tesis sobre Feurbach, http://www.marxists.org/espanol/m-e/1840s/45-feuer.htm; [en línea] , [15 /03/11].

[5]FEUERBACH, Ludwing, “La esencia del cristianismo” Ed. Trotta Madrid 2009

[6]REALE, Giovanni;ANTISTERI, Dario, "Historia del pensamiento filosófico y científico" Tomo III Herder, Barcelona 1988

ENSAYO # 1

EL FUNCIONALISMO

¿Qué es el funcionalismo?

El Funcionalismo es una teoría elaborada por Durkheim que ve a la sociedad como un equilibrio entre instituciones sociales; considera a la sociedad como un organismo vivo. Intenta comprender y explicar las estructuras sociales a partir de las funciones que desempeñan en la sociedad como parte de un conjunto. En este sentido, y bajo esta teoría, la religión viene a ser una forma de conducta humana institucionalizada.

El funcionalismo ve a la cultura como un conjunto de conocimientos, creencias y valores más o menos integrados, que definen la situación humana y las condiciones de acción para los miembros de una sociedad. La cultura es, pues, un sistema simbólico de significados.

Por último, el funcionalismo también sostiene que la personalidad humana es un complejo de sistemas de impulsos, necesidades y propensiones a responder y actuar, valores, etc.; también la personalidad es un sistema moldeado por el aprendizaje con su propia autonomía. Está teoría considera que el hombre en la sociedad se caracteriza por dos tipos de necesidades y dos clases de tendencias a la acción; es decir, el hombre debe actuar sobre el medio ajustándose a él o dominándolo y controlándolo para asegurar su propia supervivencia. El hombre expresa sentimientos y actúa según sus necesidades.

Ahora bien, la importancia de la religión, según la teoría funcionalista, se fundamenta en la necesidad del hombre de “algo que trascienda la experiencia”; esto es resultado de tres características fundamentales de la existencia humana: a) Contingencias. El hombre vive en condiciones de incertidumbre. b) Impotencia. La limitación para controlar e influir en sus condiciones de vida. c) Coordinación. El hombre debe vivir en sociedad que implica la distribución del trabajo como del producto que requiere imperativamente una coordinación.


¿Qué funciones cumple la religión en la sociedad?

1. Apoyo, consuelo y reconciliación. La religión proporciona al hombre, por su invocación al más allá, apoyo emocional frente a la incertidumbre; consuelo frente al desengaño y reconciliación con la sociedad.
2. Relación trascendental. La religión ofrece una relación trascendental a través del culto y de las ceremonias de adoración y, por tanto, proporciona la base emocional de una nueva seguridad y de una identidad más firme, en medio de las incertidumbres e imposibilidades de la condición humana y del curso y los cambios de la historia. Esta función sacerdotal de la religión contribuye a estabilizar, ordenar y, con frecuencia, a mantener el status quo.
3. Sacraliza las normas y valores. La religión sacraliza las normas y valores de la sociedad manteniendo la dominación de las metas de grupo sobre los deseos individuales, y de la disciplina del grupo sobre los impulsos individuales. Otro aporte en este rubro es que al sacralizar las normas y los valores contribuye al control social; legitima la implantación de los patrones sociales y con esto contribuye al orden y la estabilidad, ayudando a la reconciliación de los descontentos.
4. Función profética. Proporciona estándares de valores que permiten examinar críticamente las normas institucionalizadas.
5. Función de identidad. La religión desempeña importantes funciones de identidad. Por medio de la aceptación de los valores implicados en la religión y de las creencias acerca de la naturaleza y el destino humanos asociados con ello, los individuos desarrollan importantes aspectos del conocimiento que tienen en sí mismos y de su autodefinición. De esta manera, la religión afecta las ideas de los individuos en cuanto quiénes son y qué son.
6. La religión se relaciona con el crecimiento y maduración del individuo y con el paso por las diferentes gradaciones de edades distinguidas por la sociedad.





Punto de vista sobre el funcionalismo

Me parece interesante la teoría funcionalista y lo que de ella se desprende al confrontarla con la religión. Considero valioso el aporte de dicha revisión funcionalista pero también descubro algunos aspectos en los que difiero o en los que puedo señalar algún error o algo complementario, siempre desde mi punto de vista.

Creo que la reflexión funcionalista en la religión aporta diversas funciones, valga la redundancia, y que se ven plasmadas en el punto anterior. Esto es lo que considero valioso, sin embargo, me parece que el funcionalismo puede caer en un reduccionismo de lo que es la religión, y al mismo tiempo que señalo esto, me surge también la cuestión de que tal vez por tratarse de un aporte sociológico se deje de lado lo que, a mi parecer, considero primordial, es decir, aquello que va más allá de las funciones descritas, las cuales, desde un punto de vista muy estricto, podrían enjuiciarse como secundarias. Lo fundamental, entonces, sería el motivo por el cual los diversos grupos se reúnen o rinden culto a algún ser supremo, más que aquello que obtienen al pertenecer a determinados cultos o determinada religión.

Con lo anterior me siento como si hubiese extrañado la reflexión antropológica de la religión, más no sé a ciencia cierta si así lo he hecho.


¿Cómo respondería una fe cristiana auténtica a esta demanda?

Creo que insistiendo en lo anteriormente señalado se podría responder cristianamente a la demanda del funcionalismo. En lo relativo a la religión, es necesario ir más allá de aquello que se pueda obtener (y que no es malo, ni negado) como un beneficio palpable; hace falta una reflexión acerca de una dimensión más “trascendental”; es decir, si la religión está constituida por una fuerte dimensión no empírica, la reflexión que se haga de ella no debe, pues, excluir esta misma. Así, el cristianismo, deberá poner su atención y fe, no en la institución (al menos primordialmente) sino en el mismo Cristo, en Él debe buscar y encontrar más de lo que la institución le pueda ofrecer.

domingo, 13 de marzo de 2011

Zalpa y Luhman

NIKLAS LUHMAN Y LA RELIGIÓN
Desde la formulación central Luhman se propone a darle sentido al mundo desde la función que tiene que ver con establecer un sistema de la contingencia comunicativa desde la cual comunica a la comunidad lo que se quiere plantear y como construir una sociedad pues la manera es base de una sistema que soporte las funciones interpretativas, simbólicas y morales de los ciudadanos de manera que busque relacionarse con la comunidad como una unidad. Y la manera más fácil es que todos compartan un símbolo pues si no es todos mínimo un grupo para poder ser intervenido de a manera de dos puntos de vista.
El punto de vista subjetivo entran lo que llama los termino de no conciencia y de elecciones obligadas por los sujetos es decir para ser aceptado de manera reglamentario para la orden de la cristiandad tienes que estar bautizado, sin embargo hay reglas que no está exactamente especificadas pero que los fieles dan por hechas no tiene presente la obligación de una autoridad y por otro lado optan de manera libre. El punto de vista objetivo tiene que ver con los actores de campo dicho de otra manera con las relaciones que se dan con dicha institución.
Ahora bien Luhman propone que la sociedad esta divida en subsistemas los cuales mencionamos, sin embargo, divido en dos grandes apartados a la sociedad la primera es la segmentario y la segunda es la moderna, lo que diferencia una de la otra es que la primera sacraliza al mundo se habla del sentido poniéndole misterio y la segunda es tiene creencias independientes, una esfera moral fuera de la religión, lo que unen a estas dos son que las dos explican la necesidad de comunicación esto precede, que cuando la religión predomina en la sociedad son segmentarias y cuando falta son más modernas y determinan sus propios sistemas de referencia de conductas y pensamientos, este esquema ubica que para una sociología de la religión se es más difícil estudiarla de manera que cada conjunto o grupo tiende a comunicarse con sus propios signos, símbolos o códigos de manera que si tenemos a un determinado grupo se puede hacer un estudio más riguroso y organizado pues están determinados por un mismo símbolo que los uno a la inversa que uno plural.

GENARO ZALPA
La forma de estudiar a la religión por medio de la sociología es por un sistema que tengan determinadas funciones las cuales ayuden a la comunicación de esta mera Luhamn comenzará por dividir su respectiva teoría, una de las formas por la que comienza haciendo es por el pensar relacional dicho planteamiento menciona como en una sociedad los objetivos están siendo divididos por sistemas, un ejemplo claro es como en el juego del turista se van relacionando las piezas de manera que ninguna posición es determinada es decir son desiguales, de esta manera las posiciones de fuerza que invierte cada oponente son distribuida de diferente formas a que cada jugar goza de una posición diferente, veamos uno es banquero otro son lo que compran y los que tiene que jugar, etc., una vez el campo se vuelve una cierta lucha de contrarios que tiene que jugar y transformar el entorno del capital y las dichas inversiones que se vayan dando depende la posición de su fuerza esta teoría del juego puede ser muy característica de la sociedad cada aérea especifica de la sociedad tiene fuerzas y sus reglas de juego bien definida de forma tal que cada ciudadano tiene que cumplir ciertas reglas para ingresar a una club, hospital, empresa de esta forma la sociedad se va componiendo igual puede ser en la religión donde para comenzar la cuaresma tienes que optar por el ayuno comer ciertos alimento permitidos por la tradición ser bautizado etc.
Esta forma de estudiar abierta y determinada en el contexto de la teoría general, busca mediar la estructurar y las prácticas.
Las cuales suponen relaciones de campo que se dan dentro y que van siendo configuradas a manera de límites que le permitan la construcción social de su propia realidad y que de ahí acepte como viable su pensamiento o más específico a la secta religiosa a la que pertenece ver de manera desigual la forma en que se va legitimando la sociedad, la cual trasforma, siente, cree y participa en su ámbito religioso desde su lugar de partida.

viernes, 11 de marzo de 2011

REFLEXION SOBRE EL TEXTO DE Marco Ornelas

LA SOCIOLOGÍA DE LA RELIGIÓN DE NIKLAS LUHMANN

Nos situamos ahora en un punto en el que podemos visualizar, seguidamente la cuestión de una teoría de sistemas sociales, una teoría de la comunicación, una teoría de la evolución, una teoría de la diferenciación social y una teoría de las autodescripciones. Digo esto porque me es interesante ver cómo a partir de una teoría que es bien conducida hacia la praxis puede traer consigo enriquecedoras conclusiones, así como también una mejor organización y relación entre individuos, religión e iglesias que constituyen de cierta manera nuestra sociedad.
Por lo dicho anteriormente, debo hacer énfasis en que existe una diferenciación muy importante entre la religión en sociedades segmentarías y la religión en las sociedades estratificadas, y ante esto puedo decir que en las sociedades segmentarías, resultaba más complicado mover la fe o la creencia dentro del ámbito religioso y creo que esto se debía a que todo se sustentaba en la fe tal cual y pocos se atrevían a cuestionar el dogma.
Por otra parte quiero rescatar que en las sociedades estratificadas que son las sociedades modernas, creo que nos hemos dejado bombardear por un sin fin de elementos que nos han ido orillando a poner en cuestión la religión y en su defecto la fe, digo esto porque nos encontramos en un mundo lleno de tecnologías y envueltos en una globalización que nos han ido cegando poco a poco y ante esto me queda rescatar que la diferenciación no consiste en otra cosa más que en emplear debidamente el uso de razón y hacer buen uso de las estructuras cognitivas o normativas que creo que nos permiten al igual que la religión adquirir la función de interpretar y legitimar las estructuras de expectativas mismas.
Finalmente, desde mi humilde punto de vista creo que la generalización de la fe sólo puedo llevarse acabo mediante la reespecificación que tomo la forma de las iglesias organizadas, digo esto porque hemos situado la fe y mejor dicho la hemos usado, varios de nosotros para con un fin lucrativo ya sea para adquirir poder o escudarnos no de nuestras carencias como miembros de una sociedad regida tal ves por la religión y las leyes.
Para cerrar mi comentario debo precisar que el autor maneja la fe como un medio simbólico, partiendo de que el dogma de la revelación es lo que hace esto posible, digo esto porque nuestro símbolo de la fe nos hace entender en la medida de lo posible nuestro interactuar y desarrollo en nuestra sociedad. Y como de costumbre mi pregunta es ¿Qué es la fe, un símbolo o un escudo?

REFLEXION SOBRE EL TEXTO DE Genaro Zalpa

EL COCEPTO DE CAMPO Y EL CAMPO RELIGIOSO
Para poner en sintonía mi comentario debo mencionar en un primer momento que el concepto de campo, como todos los conceptos, no puede entenderse cabalmente, sino en el contexto de la teoría general de la forma parte y es que pienso que en varias ocasiones limitamos nuestro panorama al referirnos a campo como un vil espacio ya sea físico o temporal y solamente ahí lo situamos.
Vale decir, desde mi particular punto de vista que el concepto campo, en este contexto de la sociología de la religión nos exhorta a pensar en un campo, pero entendido como un ámbito de estrategias, dichas estrategias nos pueden propiciar herramientas en nuestra realización de alguna actividad colectiva – relacional para que así podamos obtener el resultado que nos interesa en ese momento y de igual manera cumplir con el objetivo establecido.
Cabe mencionar, hora, luego de presentar mi concepción de campo desde otro panorama, paso a hacer preciso que el concepto de campo, ahora con un tinte religioso, está basado en una serie de creencias, pero que a la vez no se limita a sólo creer, porque al igual que lo que mencione más arriba también en este contexto el concepto de campo me puede hacer expresar que el campo religioso también proporciona estrategias, pero en esté caso para una mejor dinámica dentro de la religión y en su defecto de las iglesias.
Me llama la atención en estos menesteres del concepto campo, ver cómo el autor nos sitúa en la realidad cambiando un poco la postura de Hegel, donde todo lo real es racional, por que Zalpa lo convierte en todo lo real es relacional, esto me incita a pensar en una postura de interacción con el otro, pero viendo en este sentido a la religión como otro, quiero decir que la relación entre miembro y religión o iglesia no debe ser tan estrecha y por el contrario debiera ser más abierto lo relacional, puesto que así se podría llegar a concretizar la relación.
Aunado a lo que acabo de mencionar, considero que la realidad social se nos presenta como un producto humano y, a la vez, al hombre como un producto social, digo esto porque ese producto del que hago mención, puedo relacionarlo con el producto que se obtiene de un buen manejo de las estrategias que se nos presenta precedentemente al campo.
Finalmente quiero mencionar que todo lo que antes dije es para sostener que el campo religioso es como la expresión de las relaciones de clase, y como el reforzamiento ideológico, enmascarado, de esas mismas relaciones de clase, digo esto porque considero que el campo religioso se construye como todos los campos, con base en creencias, lo que nos da como resultado una especie de circulo, análogo al circulo hermenéutico, en el que el campo de las creencias se basas en creencias. ¿Actualmente vivimos en el campo tal cual es, y cómo hacemos posible esto o vivimos en el campo religioso?